bares, bebidas, life style, Viajes Un bar a nada menos que 480 metros de altura El bar Ozone es uno de los más elevados del mundo y un mirador excepcional sobre las calles y luces de Hong Kong, una ciudad imponente que encantará a los amantes de las compras y los ‘dim sum’. Hong Kong no se acuesta nunca. Siempre hay en ese rincón de la costa china de siete millones de habitantes un lugar animado. Un mercado, una calle de fiesta, un gran almacén… Las escaleras mecánicas y los ascensores arrancan a primera hora y mantienen un riego constante de actividad que bombea uno de los centros financieros y comerciales más potentes del mundo. Mercados callejeros, templos budistas, parques y barrios populares con enjambres de hoteles baratos compensan el lujo de los rascacielos. Es la doble cara de una ciudad que fascina. Desde las alturas impone; en el detalle seduce. Hay decenas de terrazas en las alturas de Hong Kong. La coctelería Ozone, del hotel Ritz-Carlton, a 480 metros en el rascacielos International Commerce Centre, es uno de los bares más elevados del mundo y un gran escenario para despedirse viendo las luces de colores sobre fondo negro. Artículo anterior Viajes extremos Artículo siguiente El cubo Rubik más difícil del mundo Un bar a nada menos que 480 metros de altura Reviewed by adrian.montesanto on 31/12/2014 . El bar Ozone es uno de los más elevados del mundo, con un mirador excepcional sobre las calles y luces de Hong Kong